El ritmo de vida que hoy exige a millones de personas a cumplir son sus obligaciones, estudiar, trabajar, atender y cuidar a su familia, y todo esto en un ambiente económico sumamente complicado, socialmente violento, y poco alentador ha obligado a las personas a detenerse, re-econtrarse y revaluar sus prioridades, llegando a la conclusión que si ellos no están bien, nada a su alrededor estará bien.
De ahí que haya una tendencia generalizada en aprovechar esos momentos tan valiosos de tiempo libre para nutrir y consentir el alma y el cuerpo.
Spas, terapias, yoga, baños de bosque, cursos de nutrición entre muchas otras experiencias definen esta búsqueda por estar bien y retomar el control de nuestros cuerpos y mentes.